Mi vida cambió: ya no duermo solo.
Es lo que siempre quise, pero distinto.
La veo casi todas las noches y nunca antes había intercambiado tantos fluidos vitales con un ser viviente.
Duermo con una maldita pulga.
Resiste todo: se come los insecticidas, el desodorante, los pedorreos, y cuando logro atraparla entre mis dedos aguanta el aplastamiento (exoesqueleto insectoide, wtf?) y desaparece de un salto.
Me llega a dar anemia con tantas picaduras en el cuerpo.
Pero ya me vengaré, aunque tenga que dormir cubierto de ácido.
– ¿Y esta chaqueta, como se ve?
– Mmm… es como el mismo Pablo de siempre, pero bakán.
-… deja ver el precio. Estoy a 14 mil pesos de ser bakán.
Dicen que los huevos revueltos tienen su propio partido político.
14.000 por ser bkn?? una ganga!